Reglas, advertencias y virtudes argumentales

El objetivo general de este proyecto es contribuir —modestamente— al desarrollo de una teoría de las virtudes argumentales que tenga su origen en (pero que no por ello se reduzca a una mera interpretación de) la obra de nuestro filósofo Carlos Vaz Ferreira (1872-1958). Guía esta propuesta la certeza de que, a más de cien años de su publicación, Lógica viva (1910) es todavía un libro del cual pueden aprender los teóricos de la argumentación contemporáneos, porque en sus páginas se ejemplifica un tipo de enfoque (centrado en advertencias) que prácticamente no ha sido recorrido en la literatura posterior. Se buscará articular mediante el análisis conceptual una distinción clara y razonable entre reglas y advertencias. Se empleará esa distinción para interpretar de una manera original el proyecto detrás de la Lógica viva de Vaz Ferreira. Una vez que se haya elaborado esa interpretación, se intentará enmarcar ese resultado en un esbozo de teoría general de las virtudes argumentales, tomando como modelo la operación que en la filosofía analítica contemporánea ha llevado a desarrollar la teoría de las virtudes epistémicas sobre la base de la teoría aristotélica de los agentes moralmente virtuosos. La idea de este proyecto no es extender la teoría de las virtudes epistémicas —en ninguna de sus versiones— a la teoría de la argumentación, sino más bien explorar un camino análogo al que siguió la teoría analítica del conocimiento en las últimas décadas: el de tomar la teoría aristotélica de las virtudes morales como un modelo a seguir, en este caso por la teoría de la argumentación. De esta manera se intentará definir el acierto y el error argumentales como efectos de la estructura del carácter del sujeto que argumenta. A diferencia de perspectivas como, por ejemplo, la de John Greco, no se intentará defender una posición en que las reglas sean excluidas de la identificación ni de la evaluación de argumentos, sino una posición en que las reglas son (necesariamente) complementadas con advertencias y se identifica la conducta del sujeto virtuoso con la de aquel sujeto que toma adecuadamente en cuenta estas últimas, pero que a su vez cumple con las primeras.